LA TRADUCCIÓN EN LAS CANCIONES Y SU PROCESO
Uno de los ámbitos que no es tan tratado por los estudiantes que desean dedicarse a la traducción de forma profesional es la traducción de canciones. Sin embargo, este tipo de traducción es una actividad de gran importancia ya que, gracias a ella, la cultura musical puede ser accesible a todo tipo de público.
Lo cierto es que en muchas ocasiones no prestamos demasiada atención a la letra de la canción que está sonando y nos da un poco igual que esté cantada en un idioma que apenas conocemos. Hay otros factores como la armonía, el sentido o la melodía, que son suficientes para atraparnos. Pero, la verdad es que solemos sentirnos más identificados y mostrar más afinidad con las canciones cantadas en nuestra lengua materna. Es por esto que, en muchas ocasiones, es la propia industria la que solicita la traducción de una letra para que el intérprete pueda acercarse a mercados que, cantando en una sola lengua, no accedería.
El trabajo de traducir canciones es largo y meticuloso y para realizarlo se requiere un conocimiento extenso de las métricas y lenguaje musical pues, además de adaptar la letra de la propia canción, se deberá conseguir que el texto resultante encaje a la perfección con la melodía creada para un texto completamente diferente.
Uno de los mejores ejemplos puede ser la música introductoria de la famosa serie “El Príncipe de Bel Air”, en la que se tradujo la letra adaptándola a la música original, aunque sufriendo algunas alteraciones debido a las restricciones derivadas de mantener la melodía original. Si no os acordáis, aquí podéis echarle un vistazo.
Traducción al inglés: https://www.youtube.com/watch?v=hBe0VCso0qs
Traducción al español: https://www.youtube.com/watch?v=hA1c82miR7s
En este caso podemos afirmar que, gracias a la traducción, esta canción se convirtió en un icono tanto del mundo anglosajón como hispanohablante, ¿no os parece?
Y a vosotros, ¿se os ocurre algún otro ejemplo? Os leemos 👇🏼